Vestigios de valor

Esta serie interpela las convenciones de la masculinidad a través de la incorporación de indumentaria de vaqueta y cintos piteados, transformando este objeto asociado al imaginario del “macho” en una declaración visual de disidencia como accesorio erotico en la cultura queer, estas piezas subrayan una narrativa liberada de imposiciones sociales. La transformación del tradicional cinto piteado—símbolo de poder, virilidad y pertenencia regional— en un arnés o suspensorio se convierte aquí en un gesto de despojo deliberado, que insinúa la desnudez, desarmando la noción de vulnerabilidad. La obra desestabiliza los códigos tradicionales del género, proponiendo una masculinidad que no necesita afirmarse desde la rigidez, sino que encuentra fuerza en la contradicción y el cuerpo que se libera de expectativas impuestas. Las obras se instalan como símbolo de una fortaleza resignificada, donde lo íntimo y lo simbólico se entrelazan para confrontar los estigmas del machismo desde el lenguaje de lo material.